¿Que sería de la vida sin deseo?

Sientes que guardando lo que no te atreves a decir estas mas seguro. Seguro es un candado a los sentimientos. ¿Seguro que estas seguro?. ¿Aunque la cabeza te de vueltas?, ¿aunque nunca llegue el aun?.

Guardas en tu sutil cartera todo un infierno de nunca decir. El psicoanálisis invita, y solo eso, a decir. Cosas que no dices porque son luces en rojo en la vida. Vida que es un ir mas allá. Manías de buscar siempre en lo conocido sin saber. Agua estancada del vivir. Deja que tu decir fluya como agua nueva. Gasolina que se va gastando para hacerte escuchar, ¿cuántos años van ya de ese ser acallado por el que dirán?.
Podrías hacer algo con tu sufrir que no sea arrepentimiento. Y te sientes perdido y con rencores viejos como el fango. Ojos vendados en el corazón.
Hacer algo, un casi nada, un liberar espacios para sembrar palabras nuevas, esas que no solo son repetición de cosas costumbristas. Y hoy estas exiliado del vivir.
Entre el antes y el después esta la razón. Y la causa es Otra cosa que habilitaría lo nuevo. Lo nuevo es grito que se enuncia si te atreves a escucharte.
¿qué seria si ese día te hubieses animado a decirle eso que ese Otro quería escuchar?
¿qué seria si ese DIA hubieses acallado lo que nunca sentiste, pero dijiste solo por bronca?
¿Qué seria?.
¿Qué seria del amor sin algún reproche, sin la locura de alguna noche?
Porque cada vez que pronuncies tu nombre solo serás aquello que alguna vez dijiste o callaste.
Resguardado. Mas que guardado. Guardando y conservando penas, y para peor de amores.
Atrás no dejas nada, ni vida. Solo conservas penas.
Y conservas también recuerdos, esos que del amor dejan sus vicios. Mas si ese recuerdo despierta como alarma tu corazón bienvenido sea. Y que no sea derrota del deseo.
¿Qué seria del vivir sin un deseo que impulse?, de eso que falta e impulsa a pelear por ello, y ese acuerdo, que ahora parece tan poco cuerdo, y la cuerda que se corta por la mas fino. Habrá que hilar fino en lo doliente, en aquello que hoy no existe, pero insiste.
Habrá que hilar fino en aquello que quisimos y no pudo ser, eso que va mas allá de un tibio recuerdo. Recuerdos engañosos. Mas sin embargo llevan tatuados deseos.
Solo eso dejaremos. Un análisis es un corte al escapar de lo que se quiere de la vida. Asumir el fracaso y la perdida, pero construir en donde más duele.
No tengas piedad de ti. Si lo tienes, no pretendas que los Otros lo tengan. Pretender, es lo anterior a tender (a-tiende a aquello que suspira en tu corazón). Tiende tus redes de amor. Redes de palabras, esa que nunca te atreviste a decir, no esperes, busca. La búsqueda contempla el azar. Y el azar es caprichoso, no se sabe dónde nos llevara.
Dejar caer lo viejo, no es olvidar. Porque eso insiste aun si se lo prohíbes y de noche.
Dejar caer lo pesado es sentir que un viento sopla hacia una dirección a descubrir.
Dejar de cubrir. Descubrir. Correr velos para vivir.