Mi experiencia en aquel hospital abandonado

Cuando entré en aquel edificio jamás creí que me iba a encontrar allí me iba a afectar de semejante manera.

Todo estaba abandonado, quizá habrían pasado sesenta o setenta años, no lo sé. Algunas puertas aún permanecían cerradas, como si nadie hubiera querido abrirlas. Confieso que me extremecí al notar que nadie más había pisado aquél viejo hospital abandonado, o eso parecía. No había signos de vandalismo, ni una pintada, ni una ventana rota, aún podía verse material en las camillas... No entendía muy bien porqué.

Estuve deambulando, sacando algunas fotos de las habitaciones. Olían a viejo, a cerrado... y a hospital. Algún lugareño me dijo que en su época fue usado como hospital para enfermos mentales deshauciados, otro me explicó que en origen fue un hospital de enfermos terminales de tuberculosis. Pero todos me advirtieron que no debía acercarme. -¿Para qué quieres ir allí, muchacho?- preguntaban, cambiando su semblante cuando les confesaba que mi intención era acceder al interior, -allí no se te ha perdido nada- Debí hacerles caso, pero la curiosidad fue más fuerte. Llevaba unas horas allí, pero el tiempo se me hizo muy corto, tanto que no noté que el sol se estaba poniendo. Me puse nervioso e intenté salir de allí como pude, de pronto el miedo me atenazó y no pude controlarme. Tiré al suelo la mochila y asiendo firmemente mi cámara fotográfica comencé a correr para salir de allí cuanto antes. Quizá el subconsciente me jugó una mala pasada pero noté presencias detrás de mí, cuanto más rápido corría más miedo sentía. Bajé las escaleras de entrada y miré fijamente a la puerta de salida. Corrí tanto como pude, deseando sólo salir de allí cuanto antes. Me metí en el coche y cerré el pestillo. Había alguien conmigo, lo presentía, pero no podía verlo. Traté de coger la llave de contacto pero no me di cuenta de que ésta se encontraba en mi mochila, la misma que había soltado para salir cuanto antes de aquel sitio. Desde luego que no iba a entrar a por ella, ni siquiera tenía una linterna a mano, y aunque la hubiera tenido, no lo habría intentado. -Mañana, cuando amanezca, ¡sí, eso eso es!- me dije a mí mismo, -entraré mañana a por la mochila y las llaves-.

No pude dormir, pasé toda la noche acurrucado en el asiento de atrás, asegurándome de que el pestillo estaba cerrado y maldiciéndome por haber estacionado tan cerca de aquel viejo hospital. No se oía nada, ni un ruido. Yo pensaba que eso era una buena noticia.

De pronto desperté, estaba aterido de frío, todavía acurrucado en el asiento trasero de mi vehículo. Me di cuenta entonces que me había quedado dormido, pero ya era de día. El sol estaba saliendo. Abrí la puerta del vehículo y salí corriendo a recuperar mi mochila. Pasé miedo por entrar de nuevo allí, pero al menos recuperé las llaves del vehículo y mi documentación. Puse en marcha el motor de mi auto y me marché de allí tan rápido como pude.

Pasaron varios días hasta que conseguí sobreponerme al miedo que pasé. Fue entonces cuando decidí volcar a mi computadora las fotografías que había tomado en aquel maldito hospital abandonado. Supuse que habría grabado algún fantasma pero no, no fue así. Todas las fotos eran normales, habitaciones vacías, pasillos vacíos... fotos movidas de cuando empecé a correr atemorizado, pero nada. Excepto las dos últimas fotos, dos fotografías que yo no había hecho. En la primera aparecía yo mismo, acurrucado y dormido en una esquina del asiento posterior de mi auto... En la segunda, la última foto que fué tomada con esa maldita cámara, la imagen era más nítida y se veía algo más alejada. Yo seguía dormido en la misma postura y en la misma esquina del asiento trasero, pero en la otra...

Jamás volví a usar esa cámara, no volvi a subirme a ese coche, ni siquiera duermo ya con la luz apagada, incluso trato de no dormir por lo que pueda pasarme.

Si alguna vez encontráis un edificio abandonado no entréis, porque no sabéis qué o quién puede estar esperándoos...

Es un relato ¿eh? no es algo que me haya pasado nunca. ¿Qué os parece si posteamos relatos de miedo?